La importación de vino a granel chileno que empezó a sentirse con más fuerza desde finales del año pasado ya comenzó a llegar a las góndolas: en un golpe al orgullo nacional, dos populares vinos en caja ya contienen producto de Chile en vez de argentino
Los Tetra Brik de Termidor y Uvita, dos clásicos de la mesa del trabajador de estas pampas, ya tienen la etiqueta: “Procedencia Chile”. Así, ni la noble bebida que se jacta de ser nacional se ha salvado de la apertura de importaciones que también golpeó a otras industrias.
Los gobiernos de San Juan y Mendoza pusieron un impuesto a la importación de vinos para defender a los productores frente a lo que entendieron como una maniobra especulativa de bodegueros para empujar a la baja el precio local. Pero la importación de caldos chilenos llegó inclusive al Termidor, del Grupo Peñaflor, que hizo el famoso slogan de “Pasión argentina”, aunque el contenido de sus cajas venga desde el otro lado de la cordillera.
“Estas imágenes reflejan lo perjudicial de la importación de vinos. Son consecuencias de esta maniobra de las grandes bodegas que perjudican al sector que produce la Bebida Nacional”, expresó la Asociación de Viñateros Independientes de San Juan.